El comercio internacional y el marketing están relacionados porque el marketing es un componente esencial del comercio. Una empresa tiene que comercializar sus productos para crear conciencia y promoción.
Esto se puede lograr mediante la inclusión de la cultura local en los productos, la traducción de comerciales y la realización de estudios de mercado. La organización puede entonces querer realizar negocios a nivel internacional, mediante el comercio de bienes y servicios más allá de los límites territoriales de su país de origen. El comercio internacional es una consecuencia de la globalización, que ha creado un mercado accesible más allá de las fronteras geográficas.
Esta accesibilidad de los mercados extranjeros significa que una organización tiene que observar las costumbres locales y otras normas, para posicionarse adecuadamente y comercializar sus productos de manera efectiva. Este vínculo entre el comercio internacional y el marketing es delicado y debe manejarse con cuidado para que la empresa tenga éxito.
Por ejemplo, una cadena de comida rápida que intenta penetrar en un mercado internacional podría hacer concesiones al incluir su propia versión de algunos refrigerios locales populares en el menú. La empresa podría usar la inclusión de este refrigerio local como un ángulo para promocionarse en el mercado local. Tal táctica de marketing podría permitirle destacarse entre competidores similares que ofrecen el mismo tipo de tarifa extranjera.
La dinámica entre el comercio internacional y el marketing se puede ver en el uso del idioma local para comercializar el producto en un mercado internacional. Por ejemplo, si la empresa tiene un origen inglés, no utilizará sus jingles y comerciales de televisión en inglés para comercializar el mismo producto en un mercado asiático. Dicho producto debe promocionarse en el idioma local debido a las leyes de comercio y marketing internacional. La empresa podría incluso hacer varias versiones de los mismos comerciales de radio y televisión si el país tiene varios idiomas principales.
Una empresa que está tratando de venderse a sí misma en un nuevo mercado también realizará una investigación de mercado sobre la conexión entre las costumbres de la población local en relación con su actitud hacia los productos que la empresa tiene para ofrecer. Por ejemplo, una fábrica de salchichas o carne en conserva podría modificar el contenido de sus salchichas para reflejar las creencias y la cultura de la población local.
Si está en contra de las creencias de la población comer carne de cerdo, la empresa deberá excluirla como ingrediente en la elaboración de los productos. La compañía también estudiará el ingreso per cápita medio de su nuevo mercado para determinar cómo afectará esto los hábitos de gasto de los consumidores potenciales. Todas estas son cuestiones de marketing relacionadas con el comercio internacional.
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